• _La Policía Ambiental entregó el reptil a la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) luego de que campesinos de una finca encontraran el animal._
Un ruido cerca a su vivienda llamó la atención de un campesino en el municipio Chiquinquirá, quien al acercarse luego de ver el movimiento de las ramas y el pasto, encontró una serpiente que se movilizaba por el lugar.
Se trataba de una serpiente de piel clara, con pecas negras y manchas cafés que yacía en el piso, muy cerca de su residencia ubicada en una vereda entre los municipios de Buenavista y Maripí, en Boyacá
De acuerdo a como lo narró el campesino a las autoridades, pese a que temió por su integridad decidió no atentar contra la serpiente y dar aviso inmediato a la policía, que arribó al lugar para rescatar al reptil.
La serpiente fue traslada y puesta a disposición de la CAR Regional Chiquinquirá donde fue valorada por un grupo de profesionales que, tras adelantarle una minuciosa inspección, determinaron que la boa se encontraba en condiciones aptas para ser liberada.
Jahanna Castro, directora regional de la CAR en Chiquinquirá destacó que las charlas de sensibilización sobre el manejo de fauna silvestre realizadas por funcionarios de la Corporación y la Policía Ambiental de Chiquinquirá a las comunidades de la región, han surtido efecto.
“Personas como las que encontraron este reptil, poco a poco han tomado consciencia sobre los servicios ecosistémicos que brindan esta clase de animales a la naturaleza y los nocivos impactos que puede generar su pérdida”, resaltó la funcionaria.
“A través de campañas presenciales y virtuales por redes sociales y radio, hemos logrado sensibilizar a las comunidades para que no tengan animales silvestres como mascotas y los condenen al cautiverio. También para que hagan entrega voluntaria de la fauna que encuentren”, señaló.
De acuerdo con la Dirección de Recursos Naturales de la CAR, esta especie de serpiente, también conocida como guio en Colombia, puede llegar a medir hasta cinco metros de longitud.
Se trata de un reptil solitario y nocturno, que pasa la mayor parte del día escondido entre las ramas de los árboles o en el hueco de un tronco, pues solo suele salir a cazar en las noches. No obstante, desciende al suelo, de vez en cuando, en busca de agua. Se caracteriza, además, porque es una gran nadadora, señaló Richard Giovanny Villamil, director de recursos naturales de la CAR.
Según el funcionario, su dieta se basa en murciélagos, pájaros, zarigüeyas, lagartos, ratas y ardillas, principalmente. Asesina a sus presas mediante constricción hasta estrangularlas, de ahí su nombre.
Las serpientes como esta cumplen un rol clave en los ecosistemas, ya que mantienen, por ejemplo, el equilibrio al ser depredadores naturales de otras especies. De esta manera, ayudan a controlar su proliferación, destacó la CAR.
La entidad resaltó que, según datos reportados por del Instituto Humboltd, en el mundo existen cerca de 3.000 especies reconocidas de serpientes, de las cuales alrededor 300 se encuentran en Colombia y solo 51 han sido reportadas como venenosas.