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Capturada banda que robaba mediante «paseos millonarios» en Bogotá

Gracias a un operativo conjunto entre la Policía y la Fiscalía, se logró la desarticulación de la banda ‘Las Zetas’, acusada de realizar millonarios robos en las localidades de Chapinero y Teusaquillo, utilizando sustancias para inmovilizar a sus víctimas.

En un importante golpe contra el crimen organizado, las autoridades de Bogotá lograron la captura de cinco miembros de la banda ‘Las Zetas’, quienes se especializaban en el llamado «paseo millonario», un modus operandi que incluía el uso de drogas para neutralizar a las víctimas. Las sustancias eran suministradas por mujeres en bares y centros nocturnos, quienes luego facilitaban el robo de cuentas bancarias.

La banda, liderada por alias ‘James’, actuaba principalmente en Chapinero, Usaquén y Modelia. Tras obtener las claves bancarias, las víctimas eran trasladadas a diferentes zonas donde se realizaban transferencias y compras fraudulentas. Las autoridades lograron incautar múltiples cédulas falsas, que el grupo utilizaba para suplantar identidades y abrir cuentas digitales para mover el dinero robado.

Durante el operativo, también fueron arrestados alias ‘Campos’, ‘Dilan’ y ‘Yamid’, quienes se encargaban de la violencia física y psicológica, y alias ‘Tata’, responsable de reclutar personas para hacer las transacciones ilícitas. En total, se estima que el valor de lo hurtado supera los 300 millones de pesos.

El alcalde Carlos Fernando Galán destacó la importancia de esta operación para la seguridad de la ciudad, subrayando que el trabajo coordinado entre la Policía y la Fiscalía seguirá siendo clave para combatir estas organizaciones. Por su parte, el comandante de la Policía, Daniel Gualdrón, hizo un llamado a la ciudadanía a ser precavida y evitar recibir bebidas de extraños en lugares públicos, enfatizando la colaboración ciudadana como elemento crucial en la lucha contra este tipo de delitos.

Los capturados enfrentan cargos por secuestro, hurto y concierto para delinquir, delitos que podrían acarrear penas de hasta 60 años de cárcel.